viernes, 22 de noviembre de 2013

XII Cross de la artillería Cartagena. Recuerdos del pasado

Este domingo se celebra en Cartagena una de las carreras populares a las que más cariño tengo. No es el hecho en sí de que se dispute en mi ciudad, para mí artillería es mucho más. En esta prueba debuté como corredor popular y desde aquella primera vez hace ahora 5 años, no ha existido domingo de noviembre que haya faltado a la cita. Este año será diferente, una lesión me impide disputarla como a mí me gusta. Tengo el dorsal y ni siquiera sé si podré correr aún aunque sea al trote para sentir desde dentro la fiesta. Estamos más cerca de solucionar el problema que me causa las molestias en la rodilla derecha. Mañana sábado saldré a trotar y haremos una valoración sobre el estado actual de la lesión. Lo que no tengo ninguna duda es que de una u otra forma el domingo estaré en las inmediaciones del Puerto de Cartagena. Por si os apetece saber lo que es para mí el Cross de artillería, os dejo mis entradas en este blog de los dos últimos años. Volver a leerlas me ha servido para comprobar como ha evolucionado mi escritura estos dos últimos años. Mis letras algo han cambiado pero me alegra darme cuenta que sigo siendo el mismo. Por cierto, qué rápido pasa el tiempo.

Noviembre de 2011

Hace dos años por casualidad me apunté a un cross. Llevaría por aquel entonces otro par de años corriendo y había oído hablar de que en Cartagena, “mi Ciudad”, se organizaba una bonita carrera. Fue por el mes de noviembre, una mañana fresca pero soleada. Fue la del Cross de Artillería, cientos de corredores se darían cita aquella fría mañana y yo quedé fascinado de la fiesta que tenían montada estos tipos de artillería. Fue mi primera participación y el comienzo de mi fascinación por este mundo, el de las carreras populares. 

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   Hablar del Cross de artillería es hablar de miles de corredores. Hablar del Cross de artillería es hablar de Raúl Guevara ganador las dos anteriores ediciones. Hablar de artillería es sin duda hablar de “Cartagena” y de sus organizadores: “El regimiento de artillería anti aérea nº73, ubicado en la carretera de Tentegorra.

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   Para los que no conozcáis Cartagena, os puedo contar que Tentegorra es la patria de los andarines y corredores populares cartageneros. Lugar de encuentros, reuniones, entretenimiento y entrenamiento. Todos hemos subido alguna vez o cientos de veces su rampa de dos kilómetros, entre pinos y arbustos oliendo el puro y aire fresco, que alivia la ciudad milenaria. Asentado en un costado de la Cartagena de culturas y a los pies del monte del Roldán. Por poner un ejemplo, salvando las distancias claro está, Tentegorra para un corredor popular es la Casa de Campo o como el Retiro de Madrid. Un lugar ideal para entrenar.

Tentegorra se sube en vehículo, bicicleta, corriendo o andando. Hay un punto en el camino que es de obligado giro, y no me refiero giro circulatorio, sino giro de cabeza para contemplar a los policías militares que custodian la entrada del Regimiento 73. Si alguien no los observa es porque lleva las pulsaciones por las nubes y bastante tiene con llegar a la fuente. Algún día os hablaré de mi mili, fue en una corbeta. Pero hablando un poco más de Tentegorra, “de los Canales”, me remonto atrás cuando subía todos los días, cuando me preparaba para entrar a la policía y se me viene a la cabeza el barrio donde he pasado la mayor parte de mi vida, “la urbanización mediterráneo”. Se me viene a la cabeza cómo no, mi madre. La recuerdo porque mi entrenamiento diario, más de una década atrás, consistía en partir desde casa corriendo hasta la fuente, esprintando siempre los últimos metros desde la Puerta del Regimiento. Luego ya de vuelta y siempre cuando regresaba a casa estaba ella y a mí me encantaba que estuviera. Ahora también lo está, pero a mí me gustaba más antes. Me he desviado, si hay una cosa que siempre voy a escribir es de cada recuerdo que tengo de ella.

   Pero el Cross de artillería no se realiza en Tentegorra. Los amigos artilleros antiaéreos  del 73 cada año por el mes de noviembre reservan un domingo para desplazarse el centro Histórico de Cartagena y organizan lo que es para mí una de las mejores pruebas populares de la Región de Murcia. Nos permiten disfrutar de las calles emblemáticas del centro o del Puerto de Cartagena, bordeando el Teatro Romano, el anfiteatro o la Universidad. Este año por primera vez han cambiado la ubicación de la salida. Su partida originaria era desde el antiguo Parque de Artillería (hoy en día museo militar) y este presente se ha trasladado hasta el Puerto junto al Ayuntamiento y la Plaza Héroes de Cavite, a unos metros del submarino Peral para dar mayor amplitud a la salida y llegada. Y es que los más de 2500 corredores y los miles de vecinos que abarrotan sus calles lo demandaban.

clip_image006 Salida de la IX edición, con el Parque de artillería al fondo. Se observa el humo del cañonazo

   Y así fue como el domingo día 13 de noviembre, el mismo día que mi hijo Javier cumplía un mes, se celebraría en Cartagena la X edición del Cross de Artillería. Una edición que comenzaría con algo de retraso y con el susto de rigor provocado por el cañonazo que año tras año anuncia el comienzo de la prueba atlética. Una mañana algo ventosa, nublada pero con una temperatura agradable que permitiría a los participantes disfrutar de todo el esplendor de la prueba. Este año la carrera estuvo protagonizada por los corredores y corredoras del equipo Runtriton, que tras zanquear velozmente por las calles más bellas del centro, monumentos y edificios históricos lograrían la victoria en ambas categorías. En categoría femenina ganaría de forma clara y contundente la atleta  Wafila Benali. La prueba masculina fue mucho más disputada y solo se decidiría en los últimos metros cuando el ganador el  atleta José Manuel Cortés afincado en la ciudad cantonal, demarró en la última recta logrando llegar a la línea de meta por delante del atleta cartagenero Alberto González, ambos del equipo  Runtriton, entrando el corredor del equipo Mandarache Raúl Guevara en tercera posición, tras dejarse llevar en los metros finales de la prueba. Lo que hace todavía más importante si cabe la victoria del ganador. Ganarle a Raúl Guevara no está al alcance de cualquiera. A Raúl lo sigo desde que ganó la prueba la primera vez que participé, y que a la postre me ha servido para estar ahora aquí compartiendo pensamientos con vosotros. Por aquel entonces me deslumbró verlo volar a menos de tres minutos el kilómetro por las calles de Cartagena. Dos años después tengo la suerte de ser su amigo y de recibir con admiración e incredibilidad sus consejos.

clip_image008Trío de ases. Cortés, Alberto y Raúl Guevara

   Felicidades a los campeones y por supuesto mi humilde felicitación a la Organización. Darles las gracias por la colaboración al Ayuntamiento de Cartagena. Se las doy como corredor popular y como miembro de un cuerpo cuya experiencia  me hace entender lo difícil que es organizar un evento de estas características y al igual que hace un par de años pude leer criticas en un foro por que hubiera partes del recorrido abiertas a la circulación, este año debo quitarme el sombrero por la buena labor de todos los organizadores, policías, militares y voluntarios.

   En cuanto mi carrera, no fue sin duda la mejor, acusé el cansancio del Cross de la Policía Local de Cartagena del día anterior y los kilómetros previos de entrenamiento marcados para este día. En las rampas de subida a la Plaza de Toros pinché y ya me dejé ir hasta el final, aún así los ánimos de mi familia, mis amigos y mi entrenador me hacen soñar con reventar mi marca en media Maratón. Ese es el objetivo marcado para este final de año.

Noviembre de 2012

Amaneció radiante, la Ciudad lo merecía. La prueba, “el Cross de Artillería”.

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Como cartagenero, sólo puedo elevar halagos hacia la organización de este magnífico cross, que año tras año se supera a si misma, congregando mayor número de alicientes y por consiguiente de atletas populares. Esta carrera se ha convertido en todo un referente del deporte Regional, estando a la altura de las grandes carreras del panorama nacional. No soy yo calificador de actividades, pero puedo decir muy orgulloso y convencido de ello, que esta prueba es de diez y no hay peros…, ni admito una nota más baja. Una carrera donde deporte y artillería se dan la mano, para darnos a conocer la cultura y la historia de una Cartagena que allá por el 227 a.C.  el cartaginés Asdrúbal bautizaría como Qart-Hadast y que luego los romanos denominarían Carthago-Nova.

     Queridos amigos y lectores, si quieren correr y hacer turismo al mismo tiempo, no se pierdan el año próximo la carrera por excelencia de Cartagena. “el Cross de Artillería”

     La Fiesta la empezarían los más pequeños. Luego los más mayorcitos participarían en la milla. También, este año había prueba de cani-cross sobre la distancia de cinco mil trescientos metros.

     La carrera clásica de cinco mil metros y la carrera del faro, darían comienzo al mismo tiempo. Mil y pico corredores por un lado del paseo del muelle y mil y pico por el otro lado, formaban el montón multicolor de atletas y soldados. Muchos de ellos, Cartagineses y Romanos.

    Hasta aproximadamente el kilómetro dos, ambas carreras discurrían juntas, separándose en la entrada de la Calle del Carmen, para introducirnos en el Centro los de la carrera corta y continuar hacia el faro los de la carrera larga.

clip_image004Aquí se me aprecia encabezando la prueba corta… Por pijos….

Si hablo de mi carrera, decir que pude mantener un ritmo cómodo de cuatro minutos el kilómetro, hasta que las empinadas rampas de la muralla (de unos ochenta metros) y posteriormente las de la Universidad (ésta más dura, de unos trescientos. Ambas entre los kilómetros 2.7 al 3.8 aproximadamente) me hicieron sucumbir, como creo a muchos corredores. Luego bajada para enfrentarnos a un último kilómetro plano. Volver a doblar Gisbert y encarar la recta de meta por el paseo del muelle. Ver el arco al fondo y la gente animando a ambos lados me transportarían en volandas para cruzar la meta con ella, como siempre juntos de la mano.

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Mi tiempo el esperado 22’01’’, a 4’08’’. Había algo más de 5200. Eso sí, los mismos metros del año pasado, por lo que puedo darme por muy contento ya que bajé mi marca en un minuto y medio y el cross con esas cuestas se atraganta de cojones. Quedé entre los cien primeros (96) de más de mil. Pero sobre todo me quedo con el puesto de categoría, el 21 de  231. Aquí es donde aprecio realmente mi mejora.

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En esta prueba mi entrenador José Antonio Alcaraz, quedó segundo de la general tras Ardil. Tercero fue Gastón. El pupilo estrella de Alcaraz, Sergio Martínez Nicolás subió al pódium como segundo clasificado de su categoría. Con ellos subirían los grandes de Cartagena, José Luis Conesa, Hervas, etc

Tras recoger la bolsa del corredor, saludar algunos amigos y a los míos, volví a correr para coger ubicación y disponerme a ver la llegada más esperada del año en Cartagena. No exagero cuando digo, que ver quien gana la prueba reina de Artillería tiene un atractivo especial, pues en ella se retan tres magníficos atletas.

     Cortés, Alberto Conesa y Raúl Guevarra, nos sirven los últimos años gratuitamente este espectáculo. La demostración más grande y digna de la lucha por la gloria, de ser el primero en la mejor carrera de esta Región.

     Me desgallité animando cuando contemplaba que enfilaba la última recta, directo a la victoria mi amigo Raúl Guevarra. Él ganó este año. Con fuerza, animé por supuesto a nuestro cartagenero más rápido, Alberto González, que entraría a escasos segundos. Alberto, un fenómeno como persona. Me deshice aplaudiendo y dando gritos de ánimo a Cortés, que este año sería tercero. Qué tío más majo. A él no lo conocía y me presenté para felicitarlo. Me hizo mucha ilusión enterarme que es asiduo lector del Espíritu.

clip_image012Los tres primeros clasificados en la carrera del faro

Desde aquí, hoy quiero también aplaudir al resto de participantes y organizadores. A los militares, policías, sanitarios y voluntarios… Al público y por supuesto a los fotógrafos. Ellos inmortalizan el momento, y durante las horas y días posteriores, nos tienen rebuscando fotos como locos…, será nuestro premio, el mejor recuerdo de este fabuloso evento.

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Noviembre de 2013

Os contaré

lunes, 18 de noviembre de 2013

La maratón de Valencia vivida de otra forma

Al igual que me pasó en Murcia no pude correr en Valencia por lesión. He pagado dos carreras que no he disfrutado desde dentro, pero sí desde fuera, sobre todo esta última.

Cuando supe que no podía correrlas, leí (a posteriori, como suelen hacer la mayoría de los humanos) lo que decía el Reglamento al respecto de la devolución del importe de las inscripciones por motivos justificados.

En Murcia directamente no te devolvían el dinero. La inscripción tampoco fue cara, 25€ creo recordar. En Valencia te devolvían el 50% si justificabas la lesión antes del 31 de octubre. Sin apenas tiempo de reacción renuncié a la devolución. No me quejé de este hecho, a pesar de que un día en la red social tuiter alguien interpretó lo contrario. El único responsable cuando uno se inscribe en una maratón de leer las condiciones es el corredor, y si lo pagas las estás aceptando, aunque nos gusten más o nos gusten menos. Digo esto porque el final de esta entrada va a ser apoteósico. Es decir, que después si voy a arremeter con ganas. Pero no te bajes todavía, sigue leyendo.

espíritu gonzález en Valencia Con el abuelo runner, el cuenta kilómetros y los novatillos

Mis esperanzas de correr en Valencia eran remotas, pero de una forma u otra, con zapatillas y dorsal en carrera, o zapatillas y dorsal en el hotel, Espíritu González recalaría en la ciudad del Turia el pasado fin de semana.

El sábado pude saludar a buenos amigos blogueros a la hora de recoger la bolsa (muy pobre ésta, por cierto). Coincidí con Novatillo y Novatilla; con Manuel el cuenta kilómetros; con Javier Álamo y Alma Cup cakes de Driningrunners; con Rafael Molina, nuestro “abuelo runner” acompañado por la abuela, cada vez más guapa y más joven; así como a los compañeros atletas y directivos de mi Club, el Marathón Cartagena, Ramón Sobrino creador del blog “será posible” y Juan Luis Egea, que iban con sus familias. Se me olvidan más personas, espero me perdonen.

 

espiritu gonzalez _valencia 2 Jordi se desplazó 30 kilómetros para recibir el libro el sábado por la tarde

espíritu_valencia_1 Con Manuel y Javier Álamo

Mi lesión no me iba a dejar correr pero no iba a impedir disfrutar la carrera desde el otro lado, desde la acera (no penséis mal). Anoche llegué a casa derrotado, afónico, vacío, con dolor en las palmas de las manos y sin embargo muy satisfecho.

¿Para mí suponía un esfuerzo animar? No, rotundamente no. Disfruto aportando todo lo que puedo. Soy feliz dando todo que llevo dentro. Si ayer a alguien le pareció ver un loco clavado en 32.195 aplaudiendo y gritando a todos los corredores que pasaban por allí, ese alguien no tiene ni puta idea del esfuerzo que supone correr una maratón. Ayer fui yo, Espíritu González en estado puro. Me emocioné viendo a las corredoras y corredores felices y sufriendo. Tendía ese punto hacia arriba y muchas de las caras eran de auténtico sufrimiento. Me vacié gritando y aplaudiendo. Esto es MARATÓN. Disfruté siendo yo, luchando desde la barrera para detener al tío del mazo.

espíritu_valencia Estos iban como una moto

Sigo con los héroes. Porque todos fueron unos héroes, del primero al último que cruzó la meta. Ayer me emocioné cuando Fran Corredor paró para darme un abrazo, un tío que bajó de las 3 horas, 2.57. Observé que iba jodido Raúl de “No te pares team” y no pude resistirme, me salió de mí correr junto a él para transmitirle mi fuerza, acabó en 3.04. Alenté a miles de corredores que pasaron frente a mí, como a mi gran amigo Carlos García Vaso, 3.09 se marcó (cartagenero ilustre que escribe en el blog disfrutando del deporte y más, leerle). A Manuel el Cuenta kilómetros, otro que reventó el crono. A Raimundo, a Andrés, a Quijada, a Alma, a Novatillo, a Alex, a Rubén Lirio y su Marea Naranja de Málaga. A tantas personas que me reconocieron. Ayer me hicieron sentir por un momento el hombre más feliz del mundo. Muchos corredores me aplaudían y me daban las gracias. Hay quien gritó ¡de patrulla con Filípides!, unos cuantos ¡Espíritu González! Vulgarmente me sentí importante. Un chico que se llamaba Dani paró para decirme que siguiera escribiendo, que esperaba impaciente mi segundo libro. Dani, si lees esto ponte en contacto conmigo. Ayer disfruté la maratón.

Por eso hoy soy yo el que está tremendamente agradecido. Por eso hoy soy yo el que debe de dar las gracias a todos los corredores que pasaron frente a mí. Bueno a todos no, me dejo unos a los que no quiero dar las gracias para el final. Y el final es este.

Esta mañana he sabido que de nuevo hubo quien se quedó sin medalla en una maratón. El sábado faltaron camisetas o no les dieron a todos su talla. Esos fallos son clamorosos e inexcusables de la Organización. Igual que yo pagué mi dorsal y no se me ha devuelto el dinero, que vuelvo a repetir no reclamé. Igual que si yo hubiera pedido la devolución, me hubieran remitido a la cláusula que indicaba claramente (no tan claro pero lo dejamos aquí) que no tengo derecho más que al 50%, y que ese se me devolvería cuando finalizara la maratón. Pues igual que todo eso, la organización no puede dejar ni un solo corredor sin medalla. No puede dejar ni un solo corredor sin su talla de camiseta. Y no me vale ningún tipo de excusa. Organización, igual que exiges y cobras, da y cumple. Que hay muchos caraduras que corren sin dorsal o lo fotocopian, sí que los hay, para hacer un post aparte. Pero la organización debe poner los medios para solucionar estos problemas y si no los puede solucionar, al menos debe preverlos.

Esta mañana el corredor y bloguero Darío Collado anunciaba en tuiter que de los 11300 inscritos, sólo habían llegado a la meta 9646. ¿Alguien me puede explicar como faltaron medallas? No será la mía.

Con todo y con eso, Valencia ayer fue una fiesta. Y la mayoría, ojala hubieran sido todos, se fueron al igual que yo, muy satisfechos.

domingo, 10 de noviembre de 2013

La molestia del kilómetro 4

     Soy de la opinión que las cosas siempre pasan por algo. Si alguien no ha querido que corriera dos maratones seguidas, Murcia y Valencia, lo acepto sin problema alguno. Por una lesión no voy a dejar de sonreír y este año no va a dejar de ser mágico.

Todo igual. Esta semana me volví a probar un par de veces, pero la molestia sigue ahí, escondida entre el kilómetro 4 y el 4.5. Por supuesto, paro inmediatamente. Unos días más de descanso y zapatillas nuevas.

www.espiritugonzalez.com

sábado, 2 de noviembre de 2013

Adiós a mi Maratón de Murcia y Valencia

Hace tiempo que no escribo en el blog, que no me dejo ver por la blogesfera. No es porque no me apetezca, la vida tan ajetreada que llevo ahora me impide a veces comunicarme por un medio que tantas alegrías y ánimos me han dado.

Una maratón comienza el mismo día que decides la vas a correr, que empiezas con los entrenamientos. Pero evidentemente, finaliza el día que cruzas la metas un domingo de fiesta cualquiera.

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Mediados agosto empecé a preparar la maratón de Valencia. Por el camino comprendí que debía correr también la maratón de Murcia. Tenía motivos para ello, cierto es que no estaba obligado. Sin darme cuenta comenzaría a correr dos maratones. Cientos de kilómetros, más 84.390 metros que deberían finalizar por partes, el 3 de noviembre y el 17 del mismo mes.

Les voy a ser sinceros. He sido constante en los entrenamientos, pero las sensaciones nunca fueron buenas. Los ritmos en las series me indicaban que no andaba nada fino. Mucho calor hasta hace tan sólo unos días y puede que también pudiera influir, por lo que siempre me comentan, el estrés al que estoy sometido con el libro, que aunque no lo crean me ocupa muchas horas del día. El libro no se vende solo. Cumplo un sueño, tres ediciones en menos de un año, pero ya les digo, un sueño currado.

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Hace un mes corrí la media maratón de Mazarrón. Las fotos son de ese día. Mi intención era rodar al ritmo de la maratón más rápida. Todavía no teníamos claro, hablo en plural porque incluyo en la decisión a mi entrenador José Antonio Alcaraz, si la maratón elegida para intentar la marca sería Murcia o Valencia. La teoría (de muchos) dice que si vas a hacer dos maratones seguidas, debes darlo todo en la primera, ya que de no hacerlo así, llegarías cascado a la segunda prueba al no tener prácticamente tiempo de recuperar (una cosa así como que 42195 metros hacen pupa aunque vayas a peo puta). Pero había una seria duda, tal vez la primera fuera demasiado pronto, ya que mi forma iba con retraso, mucho retraso.

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Aquella mañana empecé a tener más claro que pasaría de la teoría (de muchos), que a Murcia iríamos a rodar y a Valencia a intentar la marca personal. ¿Por qué? Muy sencillo corrí una media maratón en 5’ clavados, 1h 45’ 00’’, sí objetivo cumplido, pero no con las sensaciones. Sufrí más que cuando un año antes entraba en 1h35’.

Mi entrenador me dijo entonces que no me tenía que preocupar. Y que el objetivo seguía sin estar decidido ya que lo que había pasado en Mazarrón no era más que fruto del mes y medio de carga. Me aseguró que las sensaciones volverían a finales de la semana. Siempre he confiado en él, pero esta vez tenía mis dudas. Dudas que enseguida se fueron al carajo, cuando pude comprobar en mi propio “yo” que tenía más razón que un santo. Cuatro días después de esa media me metí un 2x5000 a 4’30 y lo mejor, bastante fácil. Me volví a ilusionar, pero pasó lo que pasa cuando nada va de cara, que esa ilusión duró apenas tres días. El domingo tendría un largo de 28 k, que no podría terminar, molestias en el piramidal desde el kilómetro 20 me hicieron regresar andando a casa. Esa semana tuve que bajar el ritmo y visitar al fisio.

Durante un par de semanas, mediados de mes de octubre, aparecieron molestias en el culo, día sí, día también, siempre al final de los entrenamientos. Lo único positivo que las sensaciones de carrera eran cada vez mejores. Tenía un sentido, sin quererlo había entrado en descarga.

El miércoles 16 aterrizaba en Madrid. Volvía a tener una reunión con el Señor Esteban Sanz, propietario de una de las librerías deportivas especializadas más importantes de Europa. www.libreriadeportiva.com. Librería que está situada en C/ La Paz, 6, de Madrid. A 50 metros de Sol. Esa misma mañana pude completar un 2x5000 en Cartagena sin molestias en el pompis.

Llegué a Pamplona un 17 de octubre, y corrí un viernes 18 con Novatillo y Roberto Sanz. Un rodaje lento para Guillermo, pero que concluimos de manera alegre por la preciosa ciudad amurallada y con final apoteósico (para mí lo fue) en la Plaza de toros, tras realizar el mítico recorrido del encierro. Ya al llegar al hotel grité un ¡Viva San Fermín! Qué sensación correr por estafeta, que sensación correr con él, con Novatillo Total. Fueron un total de 17 K. No me resentí de ninguna molestia y nos fuimos a celebrar el entrenamiento y mi cumpleaños a San Sebastián.

1382115676007Con Guillermo, Prensa y Roberto Sanz, director de comunicación del Corte Inglés 

Celebrando el cumpleaños con Novatillo

El día anterior con Alex Uriarte habíamos presentado el libro en el Corte Inglés de Pamplona. No olvidaré nunca este día. La que lió Alex… Gracias al Gimnasio Urbanitas Center y el Corte Inglés presentamos “de patrulla con Filípides” motivo de unos actos tan bonitos como promocionar las Carreras Populares en Pamplona. “La Carrera de la Muralla” y “La Carrera Solidaria contra el cáncer de mama” que se han disputado la pasada semana y que han sido todo un éxito, ambas una fiesta.

Reportaje presentación “de patrulla con Filípides” en Pamplona

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Regresé a Cartagena con un año más, ya son 40, con la tristeza de abandonar Pamplona, despedirme de Alex, su familia, sus “muetas que corren”, su gimnasio Urbanitas Center, la Asociación Navarra contra el cáncer de mama Saray; el amigo Guillermo, su mujer, sus calles, sus pinchos, sus cervezas… con la sensación y convencimiento de que nos volveremos a ver pronto.

Con 40 años y un par días, domingo, tocaba la tirada larga. Buenísimas sensaciones hasta que otra vez el piramidal volvió a dar la lata. Esta vez en el kilómetro 22. Los últimos 6 de nuevo a pata.

El lunes 21 simplemente corrí un 15x1000 a 4’15’’ “sin molestias”. La sonrisa engañada se volvió a instalar en mí. Por la tarde me mataron el nervio de una muela, y por la noche me molestaba la rodilla. “Esto no es nada, seguro que mañana cuando salga a rodar suave se me pasa”.

Me equivoqué. No se me pasó y cuando llevaba dos kilómetros aborté el entrenamiento. No pudieron saltar más alarmar porque no tenía más activadas. La rótula me dijo que tenía que llamar urgentemente a María Angeles, la fisio del Pabellón Municipal. Casi todos los atletas de Cartagena la visitan, como norma, someterse a ella y sus agujas punzantes suele ser mano de santo.

Con punción seca en el cuadriceps y masajes tratamos la rodilla la semana pasada. Una pequeña inflamación en la articulación de la rótula a 10 días de la maratón, causada posiblemente por variar inconscientemente la zancada, todo ello por las molestias en el culo.

Tras el primer tratamiento terapéutico mi rodilla parecía evolucionar correctamente. Pero había un problema insalvable, sólo faltaba escasamente una semana para la maratón, que por cierto se celebrará mañana día 3. Que lo más normal es que se haya celebrado cuando lean esta entrada. Con la ilusión de que iba a llegar a correr la maratón, el domingo 27 decidí hacer la prueba definitiva. Desde el lunes que había hecho las series, sólo había podido acumular unos escasos 10 kilómetros. Esa misma mañana comprobé que no llegaba para Murcia. En el kilómetro 6 me volvió a doler la rodilla. Lejos de pararme, aceleré la marcha marcándome tres miles rápidos. ¿Por qué lo hice? Cuando iba rápido la rodilla parecía no dolerme. Sumé cerca de 10 kilómetros.

Desde el domingo, hasta el jueves cojo y hielo. Esta mañana de sábado he podido rodar en la bicicleta durante 20’ sin molestias. Ya no noto apenas nada, pero sé que no puedo correr por unos días. Se acabó la maratón de Murcia y la de Valencia.

Con Oscar, presidente del Club Correbirras, organizadores de la I Maratón ciudad de Murcia

Sorprendentemente me lo he tomado bastante bien. El jueves recogí mi dorsal, saludé y deseé suerte al Club Correbirras de Murcia que organiza la prueba. Esta misma mañana escribía en facebook que mañana iría a animar a Murcia. Acabo de escribir esto y no me puedo arrepentir de haberlo hecho porque me ha salido del corazón. Pero al releerlo me he dado cuenta que no voy a cruzar la meta de las dos maratones que he preparado con tanto entusiasmo y…

Gracias a todos por estar ahí.

Por si apetece ver como lo pasamos en la presentación “de patrulla con Filípides” en Pamplona. Aquí